MEDINA o MDINA es la antigua capital de Malta. (Malta, nombre procedente del griego MELITTA, que significa «abeja». La isla de Malta producía miel para casi todo el imperio romano.
MDINA es nombre árabe. El idioma maltés -cooficial con el inglés- es una extraña mezcla del árabe y del dialecto siciliano. En los manuales se dice que el maltés es la única lengua semítica que se escribe con alfabeto latino.
Los Caballeros de la Orden de Malta se establecieron ahí, después de que Jerusalén, con su Orden de San Juan, quedara en manos musulmanas.
La iglesia mayor, Catedral de San Pablo, fue destruida por un terremoto en 1693. Reconstruida, contiene hoy, además de cientos de tumbas y lujosas lápidas de caballeros de la Corona de Aragón, piezas únicas, como las varias esculturas, que talló Durero.
Otra curiosidad: en el año 1942 le fue concedida la CRUZ DE SAN JORGE, que adorna los símbolos del pequeño estado maltés.
Malta se había anexionado a la corona aragonesa desde el año 1282 y perduró en manos españolas hasta 1798 cuando fue tomada por las tropas de la república frnacesa. En el 1814, tras el Tratado de Viena, la isla de Malta pasó a ser protectorado británico. La independencia de Malta fue concedida el 21 de septiembre de 1964. El 13 de diciembre de 1974, Malta se transformó en una república dentro de la Commonwealth.
Paco Buj Vallés (2024)
La catedral de San Pablo (Mdina) está ricamente decorada en un estilo barroco. El pavimento de la nave central está recubierto con más de un centenar de lápidas que corresponden a las tumbas de personalidades que residieron en la isla durante la ocupación española, en el siglo XVIII. La decoración de las lápidas destaca por su riqueza y por los contraste del claro-obscuro obtenido mediante el uso de materiales de colores contrastados. No son pocas las referencias a caballeros aragoneses, no en vano la Orden estuvo presente, desde la Reconquista en Caspe, Tronchón, Castellote y demás demarcaciones de la Tierra Baja y Maestrazgo.
Una de las lápidas llama la atención de los viajeros calandinos por llevar un blasón idéntico al escudo de Calanda. Entre las diversas hipótesis que podrían barajarse, la primera sería evidentemente la mera coincidencia; la segunda hipótesis, la que planteamos, supondría la presencia en Malta en el siglo XVIII de un caballero vínculado de San Juan de Jerusalem, oriundo de Calanda o por lo menos con cierta filiación con la localidad. La imagen faciltada por Paco Buj no nos permite apreciar el texto que acompaña la lápida y, por lo tanto, nos impide ir más allá en la investigación.
GREC
Este epitafio está dedicado a Fray Gregorio Spinola, miembro de una ilustre familia.
«ILL(ustris) Fratris Gregorii Spinolae»: Indica que el difunto era un hermano o miembro de la Orden de San Juan (los Caballeros de Malta), específicamente del priorato de San Jerónimo.
«Sacrae Religionis Hieronymianae Baillivi»: Refleja su título de Bailli, un rango elevado dentro de la orden. Eclarissimo Genere March Roccaefortis et S.R. Imp[eratoris] Indi»: Menciona su noble linaje, relacionado con el marqués de Roccaeforte y el Sacro Imperio Romano. «Praematura Mors in Caelo Trivmphatvrvm eripv[it]»: Se refiere a su muerte prematura, con solo 30 años de edad.
El epitafio fue colocado por su sobrino, Fray Raphael Spinola, quien era Prior de la provincia de Insubria.
El lenguaje resalta el pesar por la muerte temprana de Gregorio y lo que pudo haber sido su futuro como líder militar y religioso. La referencia al cielo y la unidad que la muerte no puede romper es un tema clásico de consuelo espiritual.
Epitafio de Ludovicus Franciscus de Poniac. Este epitafio está dedicado a Ludovicus Franciscus de Poniac, también conocido como Louis-François de Poniac,quien fue un caballero de la Orden de San Juan (Caballeros de Malta). Los detalles indican que:– Pertenecía a la Religión de San Juan, en la que cumplió con sus deberes religiosos..Sirvió al Rey de Francia («de Rege Gallo») y fue parte de la armada francesa («in classe servivit»). Fue reconocido por sus grandes méritos y virtudes («de omnibus optime meritus»).
Ostentaba el título de Caballero de la Orden de San Luis y también fue un Caballero de la Orden de San Juan
(«S. Ludovici Eques dictus et S. Joannis Miles»).Murió el 25 de marzo de 1714 a causa de una herida («ex vulnere hic cecidit»).La inscripción también menciona a sus albaceas testamentarios (Fr. Joannes Gabriel de Pollastron, Lailliere Ledain y Fr. Arnaldus de Cardeillac), quienes erigieron esta lápida en su honor.