B.O.P.Z . 1 de enero de 1860
MINISTERIO DE FOMENTO.
Obras públicas.
Ilustrisimo Sr.: Accediendo S. M. la Reina
(Q. D. G.) á lo solicitado por los Señores Jordan, Oliete y compañía, vecinos y del comercio de Zaragoza, ha resuelto autorizarles para practicar, en el término de 12 ,meses, los estudios de un canal de riego que, alimentado con las aguas del rió Guadalupe, fertilice los terrenos de los pueblos de Calanda, Castelserás, Codoñera, Torrecilla, Alcañiz y otros de la provincia de Teruel; en la inteligencia de que por esta autorización no se les confiere derecho alguno á la concesión definitiva de la obra ni á
indemnización de ningún género por los trabajos que practiquen. De Real órden lo digo á V. I. para su inteligencia y efectos consiguientes.
Dios guarde á V. I. muchos años. Madrid 5 de Diciembre de 1859.=
Corvera. =Sr. Director general de Obras públicas.
limo. Sr.: Accediendo S. M. la Reina
(Q. D. G.) á lo solicitado por Don José de Ossó y Catalá, vecino de Vinebre,
ha resuello prorogar, por el término de seis meses, el plazo que se le señaló por Real órden de 27 de Mayo último para practicar los estudios de un canal de riego derivado del rió Ebro que fertile los campos de
Flix, Ascó y Vieebre, en La provincia de Tarragona; entendiéndose esta próroga con las mismas salvedades y condiciones que la primitiva autorización.
De Real órden lo digo á V. I. para su inteligencia y efectos consiguientes. Dios guarde á V. I. muchos años. Madrid 6 de Diciembre de 1859.=Corvera. = Sr. Director general de Obras públicas.
Sr. Visto el espediente instruido
en el Gobierno de la provincia de Soria á instancia del Ayuntamiento del pueblo de Arcos de Medinaceli con el objeto de beneficiar algunos terrenos de su término aprovechando unaparte de las aguas sobrantes del rió Jalón, y oido el dictámen de la Junta consultiva de Caminos, Canales y Puertos, S. M. la Reina (Q. D. G.) haresuelto autorizar al expresado Ayuntamiento, para que salvo el derecho de propiedad y sin perjuicio de tercero,tome del rió Jalón el agua necesaria para el riego de 101 hectáreas de terreno hoy secano ó erial, situado á la izquierda del rio y cuyas partidas se titulan de Arihuela, Veguilla, Canaleja y Cuadrillas, bajo las condiciones siguientes:
1 La solera de la toma de aguas ó entrada de la acequia que se ha de construir, deberá situarse medio metro más baja que la arista superior de la coronación de la presa ya establecida, que sirve para dirigir las aguas del mismo rio al molino del Duque de
Medinaceli y al riego de la Vega de Arcos por la orilla derecha de aquel.
2 .Ni el Ayuntamienlo ni los nuevos regantes podrán tomar en ningún tiempo mayor cantidad de agua que la que resulte sobrante después de cubierta la dotación necesaria para el movimiento del artefacto y riego de la vega referida.
3. La dotación de la nueva acequia, cuya derivación se autoriza, no podrá esceder en ningún caso de 119 litros de agua por segundo, que se conceden como máximun para los nuevos riegos.
4. Tanto la solera como la entrada de la acequia deberán construirsede sillería y con toda solidez.
5.Las obras se ejecutarán en todo lo demás con sujeción al proyecto presentado y bajo la inspección del Ingeniero Jefe de la provincia, quien deberá dar conocimiento mensual-
mente de lo que en ellas se adelante.
6 .El Ayuntamiento deberá acudir á quien corresponda en la parte relativa á la reunion de fondos, y para obtener la autorización que necesite para hacer la obra por administración.
7 .’ El Gobierno se reserva la facultad de disponer de las aguas del rio Jalón, siempre que lo estime necesario para establecer un sistema generalde aprovechamiento, sin que los concesionarios puedan reclamar en este caso ningún género de indemnización.
De Real órden lo digo á V. I. para su conocimiento y efectos consiguientes.Dios guarde á V. I. muchos años.
Madrid 9 de Diciembre de 1859.1
Durante el reinado de Isabel II (1833-1868), España experimentó importantes avances en infraestructuras, incluidos proyectos de irrigación y obras públicas. Aunque el país seguía enfrentando desafíos como la inestabilidad política y las guerras civiles (las Guerras Carlistas), el periodo isabelino fue clave para la modernización de varias áreas, entre ellas el fomento de la agricultura a través de la irrigación. A continuación, algunos de los aspectos clave de los proyectos de irrigación durante este reinado:
El Ministerio de Fomento
En 1837, se creó el **Ministerio de Fomento**, encargado de coordinar el desarrollo económico y las obras públicas. Durante el reinado de Isabel II, el ministerio impulsó la construcción de carreteras, ferrocarriles, puertos y, notablemente, sistemas de irrigación. Esto formaba parte de un esfuerzo por modernizar la infraestructura del país para mejorar la productividad agrícola y promover el crecimiento económico.
Fomento de la agricultura
Uno de los objetivos del régimen de Isabel II fue la «mejora de la agricultura» mediante proyectos de irrigación, con el fin de transformar áreas de secano en tierras más productivas. La Corona fomentaba proyectos que permitieran el aprovechamiento de los recursos hídricos, y muchos de estos proyectos se centraron en la construcción de canales, presas y acequias para asegurar un suministro constante de agua en regiones donde era escaso.
Canales de irrigación
En el ámbito de la irrigación, los proyectos más destacados fueron la construcción y mejora de canales. Algunos de los más importantes fueron:
Canal de Isabel II (Madrid). Este es quizás el proyecto más emblemático de la época. Concebido para garantizar el suministro de agua a Madrid, fue inaugurado en 1851 y ha tenido una influencia duradera en la distribución de agua en la capital española.
Canal Imperial de Aragón. Aunque su construcción empezó en el siglo XVIII bajo Carlos III, fue ampliado y mejorado durante el reinado de Isabel II. Este canal sigue siendo una importante infraestructura agrícola que beneficia a la región de Aragón.
Otros canales regionales. Proyectos similares se llevaron a cabo en otras zonas del país, como en el Canal del Ebro o el Canal de Urgel en Cataluña, que impulsaron la productividad agrícola mediante la irrigación en zonas tradicionalmente secas.
Proyectos de leyes y concesiones
Durante el reinado de Isabel II, se promulgó una serie de **normativas y concesiones reales** para permitir y regular la construcción de canales de riego. Estos proyectos solían ser solicitados por empresas privadas, municipios o grandes propietarios, y la Corona concedía autorizaciones a cambio de la promesa de mejoras agrícolas. Estos permisos, sin embargo, no garantizaban concesiones definitivas, y las obras debían seguir estrictas condiciones, como se ve en los ejemplos de los boletines de la época.
Estudios y planes de irrigación
El reinado de Isabel II también fue testigo del desarrollo de estudios de ingeniería y de la Junta Consultiva de Caminos, Canales y Puertos, una entidad creada para asesorar sobre proyectos de infraestructura. Ingenieros civiles y agrónomos comenzaron a jugar un papel central en el diseño y ejecución de los sistemas de riego, buscando no solo el crecimiento agrícola, sino también la mitigación de los impactos de sequías y la mejora en la distribución de recursos hídricos.
El papel de la desamortización
La «desamortización de Mendizábal y Madoz», que afectó sobre todo a las tierras eclesiásticas y comunales, liberó grandes extensiones de terreno que, en muchos casos, fueron adquiridas por nuevos propietarios interesados en mejorar la productividad agrícola. Esto estimuló la demanda de nuevos sistemas de riego para hacer más rentables esas tierras, lo que a su vez aumentó el número de proyectos de irrigación.
Obstáculos y limitaciones
A pesar de estos avances, los proyectos de irrigación enfrentaron desafíos significativos, como la falta de inversión estatal, la escasez de fondos y las dificultades técnicas para construir en terrenos áridos. Además, muchas veces las concesiones se otorgaban a empresas privadas que no siempre completaban los proyectos por falta de capital. A esto se sumaba la inestabilidad política de la época, que retrasaba el desarrollo de algunos de estos planes.
Conclusión
Los proyectos de irrigación durante el reinado de Isabel II representaron un esfuerzo importante por modernizar el campo español y mejorar la productividad agrícola en regiones áridas. Aunque enfrentaron limitaciones, sentaron las bases para la infraestructura hidráulica moderna en el país. La creación de canales de riego, especialmente en zonas del Ebro y el Canal de Isabel II en Madrid, son ejemplos duraderos de los avances en obras públicas durante este periodo.