Cartas de Emilio Serred Sanz a los radicales (1932)

El Turia. 13 de enero 1932

Religión política y propaganda.

En varios artículos que en el Turia se han publicado he visto con gran asombro y desagrado la idea desarrollada, tratando o insinuando, de persuadir al ciudadano republicano de crear y organizar sus hogares de una manera francamente láica.

Estos artículos se escribieron en octubre y noviembre y como el daño inferido es notorio y pesa en las conciencias de estos tierra- bajinos,  puesto que coma en este partido militamos muchos que profesamos la religión católica, ya entonces sentí deseos de contestar en controversia amistosa a mis correligionarios anticatolicos, pero ocurrió que mi querido amigo y correligionario, señor Formentín,  inició con un artículo está campaña, en que yo creí que tendría repetición. Pero, al no ser así y existir en pie la idea, en mi concepto erróneas, deseo aclarar y dejar bien patente me protesta porque por ello el Partido Republicano Radical de esta provincia no ha ganado nada.

Indudablemente que sus firmantes no se han dado cuenta del arraigo que en la familia española tiene el ideal de Cristo y mucho más excepcionalmente en esta Bajo Aragón en dónde, Puedo afirmar que en todos los pueblos están constituidas sus familias católicamente, y el pretender a reorganizar esta fundación tan secular,  lo considero absurdo, imposible y lamentable puesto que estas campañas en el Partido Radical sobran ya que uno de sus puntos básicos de Constitución tiene la afirmación concreta, segura y categorica de absoluta transigencia.

Pretender quitar de la conciencia aragonesa las condiciones católicas sería un error manifiesto en donde seguramente, veríamos estrellarse la idea política representativa de este programa.

Deslindemos los conceptos que religión y política tienen y veremos qué religión es: sentimiento y obligación íntima de conciencia;  virtud que nos mueve a dar a Dios el culto debido; profesión y observancia de la doctrina religiosa, coma creencia coma ley, culto, temor de Dios, piedad, devoción;  virtud moral. política es: ciencia y arte para gobernar un país coma conjunto de principios que se adoptan Al gobierno de una nación, particularmente, y en este caso concreto coma sistema particular que adopta un partido.

 Como vemos en esta comparación, dispares son sus significados y no obstante, queremos juntarlos en la práctica de la vida, cayendo en los vicios que trae consigo, al querer hacer con una la otra, hasta el extremo, de no reconocer los errores que en la vida podemos observar, y es que hasta abril se hizo con religión política y al verificarse el cambio o evolución política española, hemos observado con verdadera desazón, el grado de incultura ineducación en qué estaba subido la generalidad de nuestros compatriotas; conclusa está evolución, en fecha indicada, vemos la inversa, con política religión y ya estamos tocando sus consecuencias, al convertirse España en un verdadero laberinto.

Este panorama social, que presenta nuestra querida España no es de vida más que al uso y abuso indebido de estos conceptos, por la incultura eh indeucación  en qué estamos sumidos; incapacitados para distinguir y comprender las campañas políticas derrotistas y falaces, que hombres sin conciencia colectiva, buscan el desbordamiento de las pasiones humanas, engendrando el odio, el orgullo y la ambición; envenenando las conciencias de estos pobres campesinos, llegando en el próximo que su pasión a negar todo derecho y hasta la existencia de Dios, sin fijarse en un corto razonamiento que los qué tal les predican abusan de su inocencia, logrando en cambio ellos metro personal.

Tenemos la honra de manifestar que estas campañas no han sido sugeridas ni practicadas por los republicanos radicales.

Con amor y con cariño es como se pueden coordinar las exigencias de la vida con nuestros semejantes. y no conocidos y rencores punto de esta forma tendría más posible solución y mejor arreglo. practicando la verdadera doctrina de Cristo.

En el Partido Radical caben todos los ciudadanos, sin distinción religiosa, solo se exige que cada cual guarde el debido respeto y transigencia al compañero que tenga su lado, por esto coma todos los católicos cabemos en dicho partido, en la absoluta seguridad que no estás creencias serán respetadas y dejemosnos de laico y no la hizo, que cada cual cumpla con su deber y qué profesa la religión que su condiciones le dicta. esto es pura democracia

 Deseo por último hacer constar coma es mi criterio, que aquellos artículos que tanto nos desagradaron no fueron publicados para dejar marcado su doctrina de partido y es mi creencia , que fueron autorizados únicamente amparados en la libertad de prensa.

E. Sanz

Calanda, enero 1932

El Turia. 2′ de enero 1930

Observando la buena acogida y mejor efecto que mi anterior escrito ha producido en estos pueblos, pues es mi deseo continuar mi labor de propagandista, haciéndolo hoy para aclararles a muchos los conceptos
que en algunos pueblos me dirigen.

¿Qué es el Partido Republicano Radical? Y esos centros que fundan ustedes, qué son? ¿Qué fin tienen?

Reconozco por anticipado que me he propuesto una empresa de magnitud grande, quizá mayor que mis fuerzas, porque reconozco mi modestia cultural y mi humilde criterio, pero a este defecto tengo la virtud de un entusiasmo grande y un cariño sin límites hacia vosotros, en que creo que al hacerlo os hago, o puedo haceros, un servicio en que muy bien podría ser el término de nuestras preocupaciones.

Si Partido Republicano Radical es ante todo, un partido de orden, de sensatez, de hombres honrados que unidos bajo ei mismo ideal, desean transformer, paso a paso, con seguridad inquebrantable, despacio, escalón por escalón, porque al ir despacio llegaremos antes, la sociedad actual, podrida por tantos años de dominio señorial y de casta.

Este Partido, que nació de! pueblo y convivió con él, atesora todas las libertades, postulados y prácticas que encontró en las costumbres de sus ciudadanos, significados en el verdadero concepto de Democracia, pero en forma Republicana, por ser éste el conjunto axiomático y genuino más completo; que le dió vida su mismo impulso personal, encarnado en nuestro insigne jefe don Alejandro Lerroux, batallador infatigable, persona que siempre arrastró tras sí, núcleos de opinión por sus convicciones puras y sin mancilla; hombre recto, sencillo, ecuánime, amante y amparador de! Derecho y de la Justicia, ciudadano libre que en su camino en la vida pudo haberlo sido todo si sus convicciones no hubieran tenido la pureza sagrada deL Ideal y del deber
cumplido; de carácter indomable, que no pudo torcer ni los ofrecimientos de la realeza, ni los sinsabores y quebrantos de la adversidad. Este gran hombre es el paladín, el único Jefe de hecho y de derecho que tiene el Partido Republicano
Radical.

Unidos como un solo hombre, puesto que es un conjunto de pureza republicana y virtudes ciudadanas,
con Él vamos todos los que pertenecemos a su agrupación política para realizar el magno problema, antes citado, de regenerar a España.

No obstante, comprensivos todos los que con él tenemos este ideal, de que el advenimiento de la República es un hecho consumado y que no solo ha venido para ios viejos republicanos, sino para todos Los españoles, yo desde estas columnas os dirijo a todos los de esta Tierra Baja, y en especial a los de mi querido pueblo, un llamamiento fraternal, cariñoso, para que ingreséis en este partido, hayáis tenido el idea! que sea, que al venir a él, seguramente que vuestras convicciones serán purificadas por nuestras doctrinas y todos juntos, poder elaborar y trabajar en bien de nuestros pueblos, de la comarca y finalmente de nuestra querida España.

El Partido Radical es hoy la fuerza más arrolladora de opinión existente en nuestra Patria y en él hay campo amplísimo para desarrollar todas nuestras actividades.

Y vosotros, propietarios de vida económica solucionada! y a vosotros, obreros del campo, que pasáis la vida llena de preocupación y azar y llena también de intranquilidad espiritual por las malas enseñanzas! A todos os dirijo este llamamiento para que ingreséis en el Partido Republicano Radical,

Como veréis, esta agrupación tiene la norma de fundar Centros locales, en donde caben todos los ciudadanos, los de posición económica abundante, media y escasa; es un conjunto ideal en donde pueden, con cooperación que . dicte ei afecto y el cariño, convivir en cordialidad y armonía unos y otros, todas las clases sociales, y hasta crear protecciones tales como:Mutualidades obreras. Retiro, Protección y apoyo a los matrimonios pobres en sus necesidades.Inculcar el ahorro y la virtud corrigiendo y educando, reformando sus costumbres, elevándoles al nivel y plano que corresponde a todo ser civilizado.

Vosotros los que tenéis posición económica, abundante y sobrante, tenéis el deber ineludible de aportar vuestro concurso a esta gran obra y apoyar mitigando a los que lo necesitan, adelantando vuestra generosidad a sus necesidades, antes de que la miseria les propulse a exigencias forzosas inevitables, si vosotros no hacéis los posibles por evitarlas.

Cada uno encerrado en su posición pasada, marcando una desorientación apocalíptica, con convicciones, respetadas, pero equivocadas, que no están en el ambiente actual… así no se consigue nada… porque discutiendo y no determinando vendrán las… circunstancias peores e irremediables; hay que aportar el granito de arena para vuestros semejantes necesitados en educación y economía, y es preciso que la situación social de actualidad en todos los pueblos, en cada uno, nos la solucionaremos nosotros, que dé fuera no vendrá nadie a este objetivo.

Afiliaros al Partido Radical y seguir sus doctrinas políticas, enfocando la solución social tai como el partido la tiene regulada y veréis obreros y propietarios como cambia repentinamente la situación desagradable en que actualmente vivimos. Y os llamo a todos, sin discusión de clases, ampararos en la bandera fraterna! del Partido Republicano Radical y veréis como el rencor se convierte en cariño. Si no venís me demostraréis que no tenéis ni instinto de conservación y compenetración de ia situación política actual.

Emilio Serred Sanz.
Calanda, Enero 1932

Nota GREC

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